La red 5G requerirá una importante ampliación de la infraestructura en el futuro, sobre todo para aplicaciones como los sistemas de conducción autónoma y la Industria 4.0. Por eso hay que instalar numerosos postes adicionales en zonas ya existentes y urbanizadas, como ciudades, zonas industriales, terrenos difíciles, etc. En este caso, los materiales compuestos ofrecen enormes ventajas.
El PRFV se mantiene extremadamente estable dimensionalmente incluso a temperaturas fluctuantes, por lo que es ideal para edificios estrechos. Además, los materiales son excelentes aislantes, ya que no son conductores de la electricidad, lo que puede ahorrar costes de puesta a tierra, por ejemplo. Además, los productos de PRFV tienen muy buenas propiedades dieléctricas: el PRFV es casi invisible a las ondas de alta frecuencia.